Musica Que Edifica

Bienvenida

Agradeciendo tu bendecida visita al blog donde se glorifica al Señor! Se que será de bendición tu recorrido por aquí ya que donde esta Dios hay bendición .Te bendigo y te exhorto a mantenerte fiel y seguir caminando hacia la meta que es Jesucristo. No desmayes porque El te dara la victoria! Es un privilegio servirle a un Dios vivo y de Poder que un día me encontro y me invito a entrar a mi corazón ; y desde ese día se hizo el centro de mi vida; por quien quiero vivir y hacer su voluntad; sabiendo que E l es fiel para respaldar e ir conmigo como poderoso gigante a pelear mis batallas y levantar bandera donde quiera que mis pies caminen; gracias por estar aqui; y siempre con tu mirada puesta en Dios sin mirar atras. te dejo un Abrazos en el amor de Jesus!






Señor úsame para influir en la vida de otros.

recive ánimo, reflección, alegría y esperanza. Señor, ayúdame a servirte de forma que tu quieres, ayúdame a dar lo mejor de mí. Abre mis ojos para ver la necesidad de las personas que están tristes, que están en aflicción, desánimo, desaliento, depreción, que puedan recivir de tu amor al escuchar o leer palabra de aliento en este blog, úsame para influir en la vida de otros, enviandoles de tu palabra para que cambien sus vidas. Que mi mayor tesoro, siempre sea servirte a ti. Señor deseo que cada día me muestres que quieres que haga cada día para bendecir a otros y a mi alrededor, sobre todo muéstrame como puedo servir a mí familia, mis amigos, mi iglesia y las personas que pones en mi vidad. No quiero verme enfrascada en mi propia vida, quiero servir y ministrar la vida de otros ayúdame a capacitame para llevar esperanza. Hazme una de tus fieles intercesoras y enséname como orar con poder todo en el Nombre de Cristo Jesús Amén. La Gloria y la honra sean para ti Señor.
Por tanto id y haced discípulos a todas las naciones, Bautizándolos en el nombre del Padre del Hijo y del Espíritu Santo; ensenádoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí que yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fín del mundo, Amén.
Mateo 28.19.20
Si vosotros permanecieréis en mi Palabra, sereis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.
Juan 8:31-32.


miércoles, 8 de junio de 2011

Romanos 8:12-13 Un Consejo Biblico

Un Consejo Bíblico

30 de Mayo, 2011 (6296)


En la batalla interna que se lleva a cabo en la mayoría de los creyentes; entre la ley de la mente, y la ley del pecado, el Espíritu Santo puede, y desea jugar un papel significativo. Tiene el poder para vivificar el cuerpo en que vivimos.  Por medio de Su poder nuestros cuerpos serán resucitados. 
Hasta nuestra muerte física o la segunda venida de Jesucristo, el Espíritu Santo está preparado para darnos el poder para vivir victoriosamente.   Romanos 8:12-13 nos instruye; "Así que, hermanos, deudores somos, no a la carne, para que vivamos conforme a la carne;  porque si vivís conforme a la carne, moriréis; mas si por el Espíritu hacéis morir las obras de la carne, viviréis."  Recuerde que según Romanos 6:11 somos alentados a considerarnos como muertos al pecado. 
Aquí somos alentados a depender que el Espíritu Santo le de muerte a nuestra conducta anterior y sus prácticas pecaminosas. ¿Cómo se lleva acabo esto? Creo lo que Pablo dice está basado en sus instrucciones en Romanos 6:12-13: "No reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal, de modo que lo obedezcáis en sus concupiscencias; ni tampoco presentéis vuestros miembros al pecado como instrumentos de iniquidad, sino presentaos vosotros mismos a Dios como vivos de entre los muertos, y vuestros miembros a Dios como instrumentos de justicia.".
Resista el reinado del pecado sobre su vida. No ofrezca ninguna parte de su ser al pecado.  Más bien, ofrézcalos a Dios. Y mantenga ese compromiso ofreciendo cada parte de su ser a Dios para que Él lo use según su voluntad.  Como creyente, el Espíritu Santo habita en usted. 
Pídale que selle su propio compromiso con Dios y le advierta de lo peligroso que es, si es tentado a regresar a su antigua pauta de conducta. También, pídale que le de ánimo y poder para vivir, y hacer lo que le acerque a ser más y más como Cristo. Si hace esto experimentará la vida, abundante y eterna.

Estudio de Carta de los Romanos





UN CONSEJO BIBLICO

31 de Mayo, 2011 (6297)


Hemos estado estudiando el capitulo 8 de su carta a los Romanos para averiguar lo que el apóstol Pablo nos enseña acerca de Dios el Padre, Dios el Hijo y Dios el Espíritu Santo.  Ahora concentremos nuestra atención en lo que Pablo dice acerca de la humanidad en este capítulo.
Vemos que divide a la humanidad en dos grupos:  los perdidos y los que han sido salvados.  Siendo que todos nosotros comenzamos como perdidos consideremos esos primero.  La verdad más profunda que debemos comprender se encuentra en Romanos 8, verso 9: "Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de El.
 Si no le pertenece a Cristo, usted está viviendo sin Dios. Como consecuencia de esto, Pablo indica en el verso 5 que la gente perdida vive según su naturaleza pecadora. En esa condición ellos tienen sus mentes fijas en lo que esa naturaleza desea. Pablo sigue en el verso 6 diciendo "Porque el ocuparse de la carne es muerte".  En el verso 7 indica que "los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden".  El verso 8 llega a la conclusión que "los que viven según la carne no pueden agradar a Dios".
Si todo esto es verdad no nos debe sorprender que Pablo termina la sección de apertura de su carta a los Romanos con esta tan conocida cita de Romanos 3:23:  "por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios."  Y que en Romanos 6:23 indica que, "La paga del pecado es muerte". 
Debemos darnos cuenta que si confiamos en nuestros propios medios, estamos totalmente perdidos e incapaces de ser aprobados según los requisitos establecidos por Dios.  Estamos separados de Dios, incapaces de complacerle; y en la necesidad desesperada de Su provisión para nuestra salvación.  Pero Dios ya ha dispuesto esa provisión porque nos ama. ¡Dios te ama!, y desea que Le ames y que te vuelvas a Él por fe.



Romanos 8:29-30 Un Consejo Biblico

Hemos estado estudiando lo que Pablo escribió en Romanos 8 acerca de la humanidad que está perdida en sus pecados.  Pero aquí Pablo da a conocer que a pesar de nuestro estado pecaminoso, Dios nos ama tanto que nos ofrece la salvación como obsequio – a un precio totalmente pagado por Él. 
Si nosotros por fe invitamos a Jesucristo a vivir en nosotros, Él  entrará y Su Espíritu morará en nosotros desde allí en adelante.    Su presencia nos asegura que somos salvos.  No hay amenaza de condenación sobre nosotros. Estamos a salvo.
Pablo describe esta verdad en Romanos 8:29-30, "Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos.  Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó." 
El hecho que Dios nos conoce desde el comienzo, no sólo implica que Dios lo sabe todo de antemano, sino que también lo predestina.  Los que han sido predestinados lo son para experimentar una meta o resultado específico: Ser conformados a la semejanza de Jesucristo. Este es el proceso de la santificación que viene después de la salvación. Aquellos que son así predestinados, son entonces llamados.  Este llamamiento no es un llamado que quizás pueda sea rechazado.
Cuando nosotros predicamos el evangelio acostumbramos extender un llamado o extender una invitación. Los que escuchan este llamado tienen la opción de recibirlo o de rechazarlo. Pero el llamado al que Pablo se refiere aquí es un llamado eficaz. Tendrá como resultado una respuesta positiva de la persona que ha sido llamada.  Digo este porque Pablo deja bien en claro que los que son llamados de esta manera son también justificados. 
La única manera en que podemos ser justificados ante Dios es de responder positivamente a las buenas noticias que Jesucristo ha abierto la puerta para nuestra salvación eterna.  Este es el proceso y el resultado de ser salvos por el amor y la gracia de Dios. http://consejobiblico.com/index.htm

UN CONSEJO BIBLICO

Estamos estudiando lo que ocurre cuando una persona perdida en sus pecados entra en la maravillosa experiencia de la salvación.  Pero no termina todo allí, porque entonces comienza el crecimiento espiritual, o sea el proceso de la santificación, el que culmina con la glorificación.
Según Romanos 8:29-30 este proceso es determinado totalmente por Dios, pero experimentado progresivamente por nosotros.  "Los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo."  Y entonces explica que los predestinados fueron llamados eficazmente,  o sea que respondieron positivamente.  Y cuando lo hicieron, fueron justificados por Dios.  
El comentarista bíblico,  Dr. Wuest explica que cuando una persona es justificada, Dios mismo "lleva la culpa y la pena de sus pecados, y les concede una rectitud positiva, aún la del propio Jesucristo, en quien el creyente se mantiene firme para siempre: inocente, sin condenación, y justificado en el punto de la ley".
Los que son justificados serán glorificados.  El apóstol Pablo indica que esta es una verdad absoluta.  Notemos que él pone todas estas etapas progresivas que experimentamos en el tiempo pasado.  Con Dios, una vez que este proceso es comenzado por Él, será completado tal como lo predeterminó.  Es tan confiable como si ya hubiese sucedido.  Nuestra glorificación como creyentes se llevará a cabo cuando seamos transformados en cuerpos inmortales, tales como el cuerpo resucitado de Jesucristo.
Pablo lo explica así en Efesios 1:13-14; "En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa,  que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria."



Un Consejo Bíblico

Me agrada lo que Pablo dice en Romanos 8:15, "Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre!."
¡Que maravillosa transformación experimentan los que confían en Jesucristo!  Pasan del temor a la libertad, dentro de una nueva y poderosa relación que pasa de la adopción a la de ser hijos de Dios.
El comentarista bíblico F.F. Bruce sugiere que seamos cuidadosos de no ver las cosas por medio de comoc comprendemos nuestra propia cultura contemporánea; sino dentro de la cultura greco-romana del los tiempos de Pablo.  Escribe que el término "adopción" nos puede parecer como algo artificial; pero en el mundo romano del primer siglo después de Cristo, un hijo adoptivo era un hijo deliberadamente escogido por su padre adoptivo  para perpetuar su nombre y heredar su propiedad. 
No era en manera alguna inferior a un hijo nacido en el curso normal de  la naturaleza; y quizás hasta disfrutaría El mayor cariño del padre, y reproduciría más dignamente el carácter de su padre".
No es muy claro si es el resultado de recibir el Espíritu de adopción  lo que nos causa clamar, "Abba Padre".  O si cuando clamamos, "Abba Padre," es el Espíritu el que da testimonio con nuestro espíritu de que somos hijos de Dios.  Pero, realmente no importa.  Recibimos el Espíritu de adopción cuando depositamos nuestra fe en Jesucristo. 
El Espíritu Santo sabe cuando recibimos a Jesucristo y da testimonio con nuestro espíritu de que somos hijos de Dios. Una vez que esa relación es establecida es apropiado que nosotros llamemos a Dios el Padre, nuestro Padre, y decirle "Abba," como una expresión de intimidad y afecto, tal como la de un niño que le diga "Papito" a su padre amoroso. http://consejobiblico.com/